Hemos visto estos días en TV y en los periódicos las imágenes de los detenidos por el caso "Pretoria" bajando de un furgón de la Guardia Civil,esposados y recogiendo sus pertenencias en una bolsa de basura,con las dificultades propias de quien tiene las manos trabadas.
La verdad es que ver a personas que fueron - y lo son - tan poderosas como Maciá Alavedra y Luis Prenafeta en tal situación,casi nos mueve a decirlo en latín : Sic transit gloria mundi!!. Otra cosa esque esas situaciones,que se repiten con frecuencia,sean lógicas y ajustadas a derecho.En la época de la Inquisición los condenados eran ofrecidos al escarnio público,cubiertos con un sanbenito.Y en toda Europa hasta el último tercio del siglo XIX,los condenados a muerte eran ejecutados entre un público vocinglero y festivo.Pero todo éso ya es historia,y las penas de muerte - hasta su supresión - fueron ejecutadas con el recato y privacidad que se debía a esa terrible forma de justicia.El reo tambien tiene su dignidad,auqnue sea tambien un delincuente.
Yo creo que mientras no exista una sentencia judicial,todo el mundo es inocente,y por tanto,merece el respeto debido a cualquier persona.Y en ese sentido,pienso que deberían existir normas muy claras respecto del traslado de presos preventivos.Por los comentarios periódisticos,no parece que ese tipo de transporte este muy claro.Hemos visto desde detenidos saludando en el mejor estilo torerro a sujetos esposados de dos en dos.Nadie merece una humillación tan notoria.Y ello choca cuando comparamos esas situaciones con los miramientos que reciben individuos como Miguel Carcaño,popr mencionar un caso muy reciente.O el piratita de Somalia,tratado con tanta delicadeza que más bien parece un héroe herido de guerra.Bien está garantizar los derechos de los detenidos,pero otra cosa muy distinta es que la Justicia española haga el ridículo a escala mundial.No queremos tratar a los presos como se les trata en Guantánamo ni tampoco ver a personas que son sólo sospechosos sometidos a la mofa pública,pero tampoco a indeseables carcajeándose literalmente en la misma cara del juez.
Una vez más nuestra Justicia o se pasa o no llega.A veces parece que magistrados,jueces y fiscales hayan perdido todo rastro de sentido común.Pero esa es otra historia........
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